El gobierno de Bolivia demandó este martes a Brasil que expulse a una controladora de tráfico aéreo boliviana, que viajó al país para entregar a las autoridades información sobre la caída del avión de la aerolinea LaMia en la zona rural del municipio antioqueño de La Unión, el pasado 28 de noviembre, en la que murió la mayoría de los jugadores del equipo de fútbol brasileño Chapecoense.
El ministro de Gobierno de Bolivia, Carlos Romero, dijo que Celia Castedo eludió ilegalmente los controles migratorios al salir del país en un intento de escapar de la justicia. El funcionario dijo que Castedo era buscada en una amplia investigación sobre la autoridad aeronáutica de Bolivia tras el desastre que dejó 71 muertos y seis personas gravemente heridas.
Castedo fue la funcionaria de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (AASANA) que hizo varias observaciones al plan de vuelo del avión de LaMia que se estrelló. (Además: Cinco reparos por los que el avión de LaMia no debió haber viajado).
Después del accidente presentó un informe alegando que sus observaciones no fueron atendidas por la empresa y que, incluso así, AASANA terminó autorizando el vuelo.
Su principal observación fue sobre el tiempo de vuelo previsto entre la ciudad boliviana de Santa Cruz y la colombiana de Medellín (cuatro horas y 22 minutos), que era el mismo registrado para la autonomía de combustible que tenía el avión.
"No hay ningún argumento para sustentar una solicitud de refugio", dijo Romero en una conferencia de prensa. "Si la salida ha sido ilegal, el ingreso a Brasil también es ilegal. Lógicamente, en estos casos debería aplicarse un procedimiento de expulsión automática", argumentó.
Fiscales federales de Brasil dijeron en la noche del lunes que la mujer había acudido a ellos en la ciudad fronteriza de Corumba, luego de que la autoridad aeronáutica boliviana la acusó de negligencia. El canal brasileño de televisión Globo reportó que Castedo estaba buscando asilo en Brasil y que ella había cuestionado el plan de vuelo del avión al mostrar que la ruta elegida superaba los límites de la aeronave.
Autoridades de Bolivia suspendieron el jueves la licencia de la pequeña aerolínea que llevaba al equipo del club Chapecoense a Colombia para disputar la final de la Copa Sudamericana.
El gobierno de Bolivia ha reemplazado a la administración de su autoridad aeronáutica para asegurar una investigación transparente. Fiscales brasileños dijeron que se reunirían el miércoles con sus pares colombianos y bolivianos para investigar el siniestro.
"Nosotros consideramos que directa o indirectamente ella (la funcionaria Celia Castedo) está confirmando su responsabilidad en este evento o parte de la responsabilidad de este hecho tan trágico", dijo el ministro boliviano de Obras Públicas, Milton Claros, en una entrevista con la radio estatal Patria Nueva.
El fiscal general boliviano, Ramiro Guerrero, dijo que está en comunicación con sus pares en Brasil sobre la huida de Castedo a ese país.
"Ella es una de las principales investigadas y lo que debería hacer más bien es presentarse al ministerio público, brindar su declaración, hacer los descargos correspondientes con los informes que realizó", declaró Guerrero, quien aseguró que no se está persiguiendo a nadie.
Por su parte, Claros pidió que no se ponga "en la misma bolsa a toda la operación en Bolivia", puesto que para el ministro el accidente es fruto "de la irresponsabilidad de un funcionario, de un piloto y de una aerolínea".
Con información de El Tiempo