A pocas semanas del despegue de los primeros vuelos comerciales de Estados Unidos a Cuba tras una pausa obligada de más de cincuenta años, las empresas chárter de Florida que viajan a la isla empiezan a sentir que tienen sus días contados.
"No es posible poder competir con una aerolínea enorme, nuestra escala es diferente", expresó hoy a Efe Emily Sánchez, portavoz de Cuba Travel Service (CTS).
Esta compañía es una de los cinco más grandes que han suplido el vacío de viajes a la isla durante décadas de enemistad diplomática entre ambas naciones, y comenzará poco a poco a eliminar sus rutas a Cuba a medida que empiecen a operar los 110 vuelos comerciales a este país aprobados por el Departamento de Transporte (DOT, en inglés) de EE.UU.
Sánchez aseguró que "no tiene sentido continuar" porque van a haber muchas aerolíneas, con varios destinos a Cuba, y no cree que habrá una demanda de pasajeros suficiente.
"Creo que entre las aerolíneas se van a tener que pelear cuál gana", aseguró.
De hecho, las solicitudes de estas compañías aéreas para vuelos diarios a La Habana triplicaron la cifra de veinte que ambos Gobiernos acordaron.
Caitlin Harvey, portavoz del DOT, explicó a Efe que durante este "verano anunciarán la decisión final" sobre las aerolíneas que viajarán a la capital cubana desde diez ciudades de Estados Unidos, rutas que previsiblemente comenzarán a operar a finales del año.
Por lo pronto, el DOT ya escogió seis aerolíneas que harán noventa vuelos diarios desde cinco ciudades de EE.UU. a nueve de Cuba (excepto La Habana), entre ellas la ruta Fort Lauderdale-Santa Clara, que JetBlue tiene previsto inaugurar el próximo 31 de agosto si el Gobierno cubano lo autoriza.
Con información de EFE