El PP y Ciudadanos se han mostrado optimistas este lunes, pero cautos tras su segunda reunión, de tres horas y media, para tratar de alcanzar un pacto de investidura. "Estamos avanzando. No vemos ningún obstáculo insalvable", ha resumido el vicesecretario de Organización de los populares, Fernando Martínez-Maillo. El equipo negociador del PP ha encontrado "serias discrepancias", aún así, en el documento de medidas que Ciudadanos les envió este fin de semana, pero han decidido dejar lo más complicado "para el final". Esta tarde, a las seis, reanudan las conversaciones.
La materia laboral es la que más les separa en el primer bloque, referido a la economía y el empleo. El portavoz de Ciudadanos ha reconocido que en ese ámbito aún "queda mucho por hablar", toda vez que su pretensión es una modificación "sustancial" de los tipos de contratos laborales. La propuesta de contrato único por la que aboga el partido de Albert Rivera se va a "mantener encima de la mesa", ha asegurado Gutiérrez, "como aspiración", pero no es esa la única medida en materia de empleo que propone el partido y que el PP ve con reticencias.
Ciudadanos plantea también un complemento salarial para los sueldos más bajos; esto es, un subsidio a través del IRPF para las rentas bajas que se modula en función de la renta y de las cargas familiares, que en el PP ven demasiado oneroso para las arcas públicas. El partido propone también la llamada mochila austriaca, por la cual la empresa provisiona todos los años una parte del despido, depositándolo en una suerte de cuenta de ahorro individual que pertenece al trabajador. En el supuesto de que un empleado sea despedido, este podría cobrar como indemnización ese dinero que ha ido guardando. El PP sí ve con buenos ojos esta propuesta.
La negociación se ha dividido finalmente en cinco bloques: crecimiento económico, competitividad y empleo; sociedad del bienestar; transparencia, regeneración y lucha contra la corrupción; reforma y fortalecimiento institucional; y España en Europa y en el mundo. Maillo ha insistido en que paralelamente, aunque no puedan aprobarse hasta que haya Gobierno, quieren negociar también los Presupuestos Generales, así como el techo de gasto y las medidas de cumplimiento del déficit.
Tanto el PP como Ciudadanos han explicado que el acuerdo es a todo o nada, y que por eso no pretenden informar de los pactos puntuales a los que vayan llegando en la semana escasa de negociaciones que tienen hasta el 30 de agosto, fecha del debate de investidura de Mariano Rajoy. Maillo ha insistido en que ese acuerdo ayude a "convencer" a Pedro Sánchez para que los socialistas se abstengan en la votación.
Con información de El País